capitulo-748-negociacion-aur
Capítulo 748: Negociación. Aur
56169
988
(function(w,q){w[q]=w[q]||[];w[q].push(["_mgc.load"])})(window,"_mgq");

TG - Capítulo 748

Capítulo 748: Negociación.

Aurora caminó por el pasillo de su casa y entró lentamente a su oficina, soltando un largo suspiro.

Ella tenía muchas tareas pendientes, algunas de las cuales sus resultados traían preocupaciones.

“¿Que tan segura de que el padre de Clémentine fue afectado por ese ser?” Preguntó Aurora cuando cerró la puerta de su oficina.

La conversación con Clémentine fue una de las razones que le estaba preocupando. Ella estaba dispuesta a luchar con ese ser y ser la principal fuerza de batalla, pero la situación se complicó más de lo esperado.

“Tu amiga prácticamente lo confirma. Ningún humano se protegería de ese modo como ese hombre incluso uno paranoico. Que no pueda descubrir mucho más de su rutina es una prueba de que ese hombre es un activo protegido.”

La respuesta de Jezabel fue inmediata y Aurora volvió a suspirar. Clémentine al conocer a su padre elevó sus dudas y a los ojos de Jezabel confirmó que Jacob Delacroix era sospechoso.

En principio el grupo formado por Ojos Grandes parecía conformado por personas poderosas o influyentes, como lo era el Arcangel de la Guerra o el antiguo Cardenal Aymeric Auguste.

O personas ambiciosas como lo era Isaac Wegner, quien ascendió rápidamente para volverse alguien tanto famoso como poderoso.

Y existían otros individuos que Aurora suponía que tuvieron alguna relación con ese grupo como Kong Tian y Tang Bai en el Sexto Portal Abismal. Todos ellos tenían en común que eran conocidos en sus respectivas organizaciones o naciones.

El padre de Clémentine era todo lo contrario. Un hombre de negocios que no destacaba y que lideraba una empresa que si bien estaba centrada en lo psionico se mantenía en segundo plano y un hombre que formaba parte de la iglesia, pero que parecía más alguien que apoyaba en vez de alguien con influencia.

Imaginar que él era parte del grupo sonaba descabellado y en situación normal hubiera sido difícil de descubrir.

“Gracias por la ayuda.” Dijo Aurora en voz alta.

Sin la ayuda de Jezabel, ella no habría podido descubrir los problemas relacionados con Jacob y la situación se podría haber vuelto catastrófica.

“No necesitas agradecer. Seguiré investigando a magos de agua, pero mi suposición es que aquel relacionado a ese grupo es el rango SS de Rusia.” Informó Jezabel y Aurora levantó sus cejas cuando un nombre se le vino a la mente.

Durante el ataque que Alice y Érica realizaron al grupo, no solamente el Arcangel de la Guerra apareció, sino que un individuo que utilizó magia de agua e investigar a esas personas era lo más normal.

“Vladislav Vasíliev… Recuerdo que él fue al portal de los Slaran y ese portal terminó con resultados inesperados.” Murmuró Aurora.

Vladislav Vasíliev un mago de agua de rango SS que lidero la expedición en el Tercer Portal Abismal que hizo surgir al Profeta. Ese portal también trajo cambios inesperados y si bien ella en ese momento era demasiado débil, se informó sobre la situación.

Todavía recordaba el video de un Goblin que parecía haber sido poseído y se suicidó sin razón aparente y otros tantos eventos de este tipo que fue manejado por la Iglesia del Orden.

“¿Cuantos seres ha traído durante ese periodo? ¿Cuantos enemigos estaríamos enfrentando?” Dudó Aurora en voz alta y dando golpecitos a la mesa, preguntó. “El Profeta trabajó de cerca con la Iglesia del Orden y él fue uno de los desaparecidos durante el accidente con el antiguo Cardenal Auguste.”

El grupo de Ojos Grandes se estuvo moviendo durante mucho tiempo, realizando acciones ocultas y preparándose, lo que validaba su idea de que necesitaba refuerzos.

Nicole le había contado el ser que ella se enfrentó durante el conflicto en Norte América cuando ella ascendió y la existencia de un individuo que podía crear clones de sus enemigos demostraba que Ojos Grandes tenia fuerzas que no había mostrado.

“El Ivras sigue reclutando criminales en las tierras sin ley. Muchos de ellos ni siquiera son conocidos u ocultan su fuerza.”

La voz de Jezabel se extendió por la oficina y Aurora asintió. Ivras era parte de ese grupo y si bien ella hizo que su nombre apareciera en la lista de enemigos públicos, ese individuo seguía libre.

Altamente vigilado por Jezabel y otros, pero libre al final y la razón era que era más fácil dejar que su enemigo reuniera sus fuerzas donde ella pudiera verlas. Por supuesto, creer que las fuerzas que estaba reuniendo Ivras eran la fuerza principal seria caer en la trampa de su enemigo.

“Es hora de hablar con Alice.” Murmuró Aurora y suspirando, añadió. “Dile que venga. Ya cumpliste tu parte de trato con ella.”

“No sé de qué hablas…”

La pequeña voz de su cuñada sonó en voz baja y Aurora agitó la cabeza con una sonrisa. Que Jezabel trajera el tema de Ivras era para traer el nombre de la persona que podía solucionarlo.

Alice con su grupo estaban en las Tierras sin Ley y la razón por la cual Ivras estaba reuniendo fuerzas en esa zona era para enfrentar a los dos Rangos SSS que habían aparecido y que eran Hermes y la Reina.

¿Su hermana le pidió un favor a Jezabel? Aurora supuso que Jezabel para ganarse a su hermana la estaba ‘ayudando’ directamente.

Aurora esperó en silencio durante unos segundos y luego sintió la presencia de su hermana.

Ella desde que había vuelto no habló con su hermana. No era porque seguía enojada, para ella había pasado muchos años desde la traición de su hermana, sino que tuvo que encargarse de muchas cosas y a la vez, fue ligeramente vengativa al dejarla esperando.

No estar enojada no significaba que no pudiera ser mezquina.

En teoría estoy cerca de ser una Semidiosa y sigo siendo mezquina… Aurora pensó en silencio mientras veía a su hermana aparecer.

Alice llevaba una expresión seria, tratando de no mostrar ningún rastro de emociones y queriendo ocultar todo lo que estaba pensando. Aurora sabía que era similar a Érica, y que no iba a disculparse.

Ambas se miraron durante unos segundos en un silencio que Aurora pudo percibir que incomodo a su hermana y la puso nerviosa.

Era difícil saber cuándo Alice estaba nerviosa, ella a diferencia de cuando era más joven controlaba su cuerpo de manera perfecta. Quizás debido a la naturaleza de sus poderes y su alto rango en este momento.

Y su hermana era poderosa, siempre lo había sido, pero durante su batalla con ese ser en el Plano Astral reveló lo que era capaz. Su hermana afectó a ese mundo más de lo que ella había logrado a pesar de que ella era una Semidiosa.

Aun así…

“No estoy enojada, Alice.” Dijo ella y mirando a su hermana mientras sonreía lentamente al verla nerviosa, añadió. “Tuve mucho tiempo para pensar y para pasar todo el enojo que pude haber tenido.”

Ella sabía cuándo su hermana estaba nerviosa, por los pequeños movimientos, su mirada y sus ojos negros que se temblaban o la forma que ella se quedaba inmóvil. Incluso sin sus habilidades ella podía saber lo que su hermana sentía.

Estar juntas durante años le dio esta clase de compresión y estar juntas durante tanto tiempo también hizo que ella durante su tiempo en entrenar pensara en su hermana.

“Cuánto tiempo?” Preguntó Alice, ella supo de lo que estaba hablando, pero parecía no estar al tanto.

¿No se le informó? Probablemente Jezabel no le informó de que clase de entrenamiento ella llevo a cabo… O no tuvo tiempo.

Existía una diferencia de tiempo entre la Tierra, Terra Nova y Beldaría el mundo donde ella durante mucho tiempo.

“Importa?” Preguntó Aurora y agitando la cabeza, declaró. “Tuve tiempo para pensar, para darme cuenta de que lo hiciste es algo que yo hubiera hecho. Sería muy hipócrita de mi parte enojarme por eso.”

Ella se refirió en pasado a sus acciones, porque ahora trataba de no cometer los mismos errores y mentirle a sus amigos o familiares era uno de los errores que ella trataba de evitar.

Alice mantuvo su fruncir de ceño y Aurora continuo.

“En ese tiempo mayormente tuve ocupada y tuve muy pocos momentos para pensar, pero en esos momentos me di cuenta de muchas cosas.” 

Alice se tensó al escucharla y Aurora ocultó la risa que quiso surgir al darse cuenta de que su hermana estaba tensa por la razón equivocada. 

“¿Sabes lo vacío que se siente no escucharte comer tus papitas? ¿O alguien que escuche mis desvaríos mientras estoy sola? ¿O alguien que me acompañe a todas partes?”

En gran parte de su vida y en la mayoría de las situaciones, su hermana estuvo a su lado. Era difícil no ver a su hermana como parte de su vida y era tan natural que estuviera a su lado y la acompañara, que cuando la traicionó la enojo.

Incluso si en los últimos años antes de irse estuvo apoyando a su hermana para que saliera por su cuenta y tuviera sus ideas y objetivos, el sentimiento seguía siendo similar. Su hermana una compañera de vida.

En ese mismo sentido se podría decir que su hermana tomara esta decisión con Érica fue como resultado de que su búsqueda de que su hermana tomara sus propias decisiones.

Alice se tensó, cuando ella se acercó.

“No necesitas pedirme disculpas, Alice. Ya que ya te disculpé.”

Si bien era cierto que hizo algo mal, Aurora sabía que era algo que ella misma hubiera hecho. Además, no requería disculparse porque ella la había perdonado hace tiempo.

(function(w,q){w[q]=w[q]||[];w[q].push(["_mgc.load"])})(window,"_mgq");

“Es más me siento feliz de que mi hermana hiciera algo por su cuenta y fuera algo malo.” Dijo ella y le salió una risa que no pudo contener.

¿Fue su risa? ¿O que ella la estaba tratando como una niña? Alice frunció el ceño por un segundo.

“Yo he hecho cosas por mi cuenta.” Murmuró Alice de manera inconsciente.

“¿Ir a uno de tus tours gourmet?” Dudó Aurora y sin poder contenerse, cuestionó. “¿O tu novio secreto?”

Aurora sabía que Alice se refería a Hermes y a su amiga la princesa Arwa, pero no pudo contenerse y molestó a su hermana.

Y a Alice le disgusto que ella tratara a Hermes como su novio, ella lo vio en su rostro, en el fruncir de ceño con disgusto y Aurora no contuvo su sonrisa.

No muchas personas podían ocasionar esa molestia y disgusto en ella y Aurora evitó decirle a su hermana que entre más evidente su molestia, ella seguiría bromeando aún más.

“Un error, un par de secretos grandes o pequeños no me enojara ni me molestara. Eres mi hermana, Alice y eso nada lo cambiara.”  Dijo Aurora y sin esperar, abrazó a su hermana suavemente.

Alice se sorprendió por su abrazo o quizás por sus palabras que denotaban algo más, pero lentamente se relajó y suspiró aliviada.

“Él no es mi novio.” Alice murmuró esas palabras y Aurora al separarse y ver la expresión de su hermana, se rio a carcajadas hasta el punto de que le salieron lágrimas.

De todo lo que podría aclarar, Alice aclaró el punto que no necesitaba hacerlo.

“Si, si como digas.” Su respuesta causó que su hermana frunciera el ceño aun con más disgusto y ella se separó para mirarla. “Durante mucho tiempo he tomado lo siguiente como un hecho, pero ahora me gustaría preguntarlo… Alice, ¿me podrías ayudar?”

¿Cuantos años su hermana la ayudó sin ni siquiera pedir? Su hermana siempre estuvo a su lado, pero ahora ella quiso pedir su ayuda directamente.

“Déjame a aclarar, no es solo una ayuda para lo que está por venir. Hay muchas cosas que quiero hacer, tanto en un futuro inmediato como en muchos años.” Aurora aclaró con un tono solemne.

Se sentía que estaba dando un trato para que su hermana vendiera su alma y trabajara para ella como una esclava, pero la realidad era que ella tenía intenciones de hacer muchas cosas.

Ahora eliminar a Ojos Grandes y ascender, pero cuando ascendiera y se convirtiera en una Diosa, ella tenía más objetivos.

Convertir la Tierra en un mundo más pacífico y más unido era una de sus objetivos, pero luego mirar más allá… Los Portales Abismales le mostraron que la Tierra fue el único mundo donde los Dioses apoyaron de manera directa o indirecta, dejando miles sino es que cientos de miles de mundos y sus habitantes solos.

Pensar en ayudar a esas civilizaciones, no sonaba como un mal trabajo. Quizás la escala cambiaria, pero la esencia de lo que siempre hizo seguiría siendo lo mismo.

“¿Qué tal interesada en ser mi colega?” Preguntó Aurora.

Su hermana ni siquiera preguntó cuál era la tarea y al inicio asintió y luego la observó durante unos segundos.

“¿Y el pago?” La pregunta fue ligeramente en voz baja, se notaba que buscaba bromear con ella como siempre lo hicieron.

Buscando ver que nada cambiara y Aurora se puso seria, llevando a que Alice también se volviera seria y…

“¿De cuantas bolsas de papitas estamos hablando?”

Alice simplemente sonrió al escuchar su pregunta y Aurora también, pero por dentro estaba siendo ligeramente seria.

Después de todo esta parte era lo más importante de la negociación.

******

En la sala del Palacio Blanco, Víctor se mantuvo mirando la televisión en el sofá mientras que acostada con la cabeza en su regazo se encontraba Ersin con los ojos cerrados.

Las noticias sobre el enemigo conocido como ‘Ojos Grandes’ y la larga lista de nombres de los cuales algunos eran de su Imperio sonaba distante a sus oídos.

Su mente centrada en la figura detrás del discurso del Sumo Pontifice de la Iglesia del Orden, que desde que había llegado había traído cambios inesperados de los cuales eran difíciles ponerse al día.

Una parte de él le hubiera gustado seguir con el conflicto secreto que estaba llevando en Estados Unidos, pero se tuvo que detener debido a la presencia y regreso a la vida de Aurora Campbell.

Lo segundo era una obviedad, pero el problema era su presencia. La forma que volvió y desveló al mundo este enemigo y esta organización que él enfrentaba.

Ni hablar de las noticias que llegaban de que Zerzura se preparaba para algo grande y los movimientos de gigantes como la Empresa Cosmos y Apicius.

Si él atacaba a los Estados Unidos, ¿ella intervendría? Incluso si en una batalla él tenía confianza, el problema era todos los demás.

Respaldada por las dos iglesias más influyentes de la Tierra y respaldada por las dos Empresas más importantes, junto a dos Ciudades que, si bien no eran naciones gigantescas, se podía considerar potencias. Esto último era especialmente cierto para la Ciudad Atlántida de la Empresa Cosmos.

Ahora ambos estaban del mismo lado, pero si él realizaba un movimiento que los pusiera en conflicto, Víctor sabía que esa joven mujer vendría a enfrentarlo.

Incluso si él ganaba la batalla y era más fuerte que ella, no serviría de nada si su Imperio se derrumbaba cuando esas dos empresas se le pusieran en contra.

Ni hablar de los Primordiales, el cual él sabía que eran muy cercanos a ella… Existían muchas razones para no hacer un movimiento en este momento tan delicado.

“Necesitas esperar. Nicole probablemente vuelva pronto con noticias.” 

Ersin que estaba recostada en su regazo, abrió los ojos revelando sus brillantes ojos blancos.

“Si ese ser es tan fuerte como la Iglesia del Orden ha mencionado en los informes que ha enviado entonces nos pedirá ayuda. Nicole y su grupo ya nos tratan como sus aliados, no nos dejaran de lado en este momento tan urgente.” Ersin dio un análisis acertado y preciso.

Su grupo no requería enfrentarse a Aurora y sus aliados, es más resultaría una estupidez si ambos se enfrentaban en este momento tan delicado y él al igual que sus amigos podrían ser muy buena ayuda.

Sin embargo…

“No le molesta esperar, le molesta no estar en control.”

Una voz sonó a su espalda.

Ersin desapareció de su regazo y Víctor se levantó liberando su aura, al escuchar la voz. Su mente se tensó y un escalofrió recorrió su espalda al darse cuenta de que alguien había entrado.

El Palacio Blanco era una fortaleza mágica, un artefacto creado por un dragón y la guarida de uno, lo cual significaba que para intentar entrar se requería la fuerza al nivel de Dioses o…

Víctor pensó en la voz y luego se giró para ver a una persona en la entrada, sus ojos negros fijos en el mientras llevaba una sonrisa en su rostro.

“Su Majestad, es irrespetuoso entrar sin avisar.” Ersin habló y a pesar de su tono ‘respetuoso’ al reconocer al hombre, su voz sonaba fría.

“Lo siento.” Respondió Karzhal bajando sutilmente la cabeza en disculpa, también conocido como el Enemigo de la Humanidad y mirando a Ersin, explicó. “Quería realizar una pequeña broma.”

Su amigo, el mago más grande de la tierra y uno de los más grandes magos en Terra nova, que era tan temido tanto en este mundo como en el otro, actuó como siempre lo hizo, disculpándose sinceramente.

“No lo juzgues, Ersin. Ya sabes que Karzhal es un pervertido. No te olvides quien es su esposa.” Víctor habló para apoyar a su amigo.

Ersin desvió la mirada no queriendo inmiscuirse en este asunto y más cuando la expresión de su amigo tembló.

La Emperatriz del Infierno le gustaba aparecer como una niña y si bien tenía sus razones de que usara esa forma debido a que contenía su poder de esa manera, era un hecho de que su amigo estaba saliendo con ella.

“Yo no soy el real.”

¿Era un clon? ¿Estaba diciendo que como un clon no estaba saliendo con ella? Víctor había visto como Jezabel trataba a los clones con desagrado solamente queriendo al verdadero, pero…

“Tienes los mismos gustos, ¿no?” Preguntó Víctor acercándose y se rio a carcajadas al ver que su amigo no respondía.

Incluso como clon seguía siendo el mismo… Su viejo amigo había vuelto y para Víctor su llegada significaba que muchas cosas estaban por cambiar.


Reacciones del Capítulo (0)

Inicia sesión para reaccionar y/o comentar a este capítulo

Comentarios del capítulo: (0)