Enorme diferencia.
La mayoría de los cultivadores de la familia Xu estaban confiados. A pesar de los enemigos desconocidos, una chispa de esperanza ardía en sus corazones: tres etapas de ventaja. ¿No era esa una brecha más que suficiente para ganar?
“Seré el primero en ir”, dijo alguien entre la multitud, un adulto joven, en sus veinte quizá; con una espada en la cintura y confianza en su andar.
Subió a la arena marcial y dijo al hombre de mediana edad “Puedo retar a quien quiera, ¿es correcto?”.
“Siempre y cuando no estés tres etapas sobre quien desafíes, puedes”.
“Bien... entonces, tú sube”, señaló a alguien entre la multitud, desarmado y promedio entre sus compañeros.
El desafiado sonrió con burla y subió de un salto a la arena marcial.
Una vez en la arena marcial, el desafiado ahuecó los puños frente a la multitud y se presentó “Soy Ning Zhi, tercera etapa de condensación de qi”.
Quien lo desafió le preguntó: "¿Por qué te presentas frente a la multitud?".
El cultivador de las túnicas carmesís negó con la cabeza “No me quiero presentar muchas veces.”
El cultivador de la familia Xu lo miro con burla “No te preocupes, no tendrás que presentarte muchas veces”. Sonrió confiadamente y se presentó “Soy Xu Yiran...” Slingggg... Envainó su espada: “Sexta etapa de condensación de qi”.
El hombre de mediana edad dijo “Empiecen".
Xu Yiran fue el primero en atacar; avanzó rápidamente y lanzó un tajo descendente con su espada. En el momento en que la espada descendía, la palma delantera de Ning Zhi se volvió carmesí como la sangre y atrapó con su mano la espada. Su mano tiró la espada, obligando a Xu Yiran a dar un paso adelante por inercia; pero cuando lo hizo... un poderoso golpe de Ning Zhi lo recibió en la quijada.
Xu Yiran colapsó en el suelo, inconsciente. Ning Zhi solo negó con la cabeza riendo “Bueno...” tomo la espada de Xu Yiran del suelo y con un simple tajo descendente lo decapito “ahí va el primero” miro a la multitud y pregunto “¿Quién sigue?”
El silencio se hizo notar, todos se quedaron de piedra; por supuesto que nadie quiso subir. Un solo golpe... ¿A pesar de haber tres etapas de diferencia? ¿Era ese tal Ning Zhi un genio celestial?
Después de retirar el cadáver decapitado de Xu Yiran y al no haber voluntarios por un par de respiraciones. El hombre de mediana edad en la arena marcial, Mo Tianzhu, dijo con tono casual “Si se dan por concluido los enfrentamientos, entonces iniciaremos con la erradicación de su familia”.
Y así... de entre la multitud, alguien gritó “¡E-espere!, ¡Aún hay más dispuestos a luchar!”. Ir a luchar era jugarse la vida, pero quedarse era certeza de muerte; al menos eso se podía deducir de las expresiones de los ancianos.
Aquel joven que gritó subió a la arena marcial “Soy Xu Tao, sexta etapa de condensación de qi”.
“Ya sabes mi nombre”, dijo Ning Zhi con indiferencia. “Así que continuemos”.
“Comiencen”
El duelo comenzó y en unos pocos movimientos... Xu Tao murió.
Después de Xu Tao, otro joven subió otro a pelear y después otro. Todos murieron a manos de Ning Zhi; pero después de pelear cuatro veces, su respiración era agitada y sus manos temblaban ligeramente.
Eso creó algo de esperanza en el corazón de los miembros de la familia Xu. Si Ning Zhi era derrotado, entonces sería más fácil después; después de todo, es imposible que todos ellos sean tan fuertes como él; o al menos eso pensaban.
Un joven dio un paso al frente... y luego se detuvo. Miro las manchas de sangre y bajo la cabeza. Nadie dijo nada, pero todos lo entendieron; nadie más quería morir.
Pero otra persona subió a la arena marcial.
“Xu Rin, sexta etapa de condensación de qi”, se presentó una joven, la discípula del recién fallecido anciano Luo.
Xu Rin tomó una respiración profunda para calmarse a sí misma y desenvainó su espada.
“Ya me presenté antes”, dijo Ning Zhi con una sonrisa agotada.
“Comiencen”
El duelo comenzó. Xu Rin estaba nerviosa; el temblor de sus manos la delataba, pero en su mirada... La determinación por vivir era palpable.
(Maestro... préstame tu determinación).
Xu Rin se movió primero. Su espada trazó un arco veloz. Ning Zhi intentó repetir su truco habitual, alzando su mano para atraparla... pero la hoja giró justo antes de ser atrapada. Cortando ligeramente el antebrazo de Ning Zhi.
Él tomó algo de distancia y su expresión pasó de diversión a seriedad.
El combate se volvió un juego de distancias. Ning Zhi lanzaba golpes que Xu Rin esquivaba por centímetros. Ella contraatacaba con cortes que terminaban en heridas menores para Ning Zhi. Cada ataque de Xu Rin era impredecible, usando rápidos cambios de dirección para evitar que atrapen su espada.
Viendo la pelea a la distancia, Xu Zhen reflexionó un momento.
(Esta es la gran diferencia entre los miembros comunes de la familia y los discípulos de los ancianos.)
En el reino de condensación de qi... simplemente había demasiados factores para saber quién ganaría o perdería una pelea; cuerpo físico, uso del qi, técnicas marciales, uso de tesoros, determinación en combate y artes marciales. Todas esas cosas podrían determinar el resultado de una pelea.
Xu Rin definitivamente era mucho más débil que Ning Zhi, pero su manejo de la espada le permitió sobrevivir más de un par de intercambios. El anciano Luo había hecho un buen trabajo en su enseñanza; después de todo, si su uso de la espada fuera común y corriente, hubiera muerto hace mucho.
La pelea continuó; Ning Zhi no fue capaz de acertar un solo golpe mientras que Xu Rin lo cortaba en casi todos los intercambios, cortes ligeros, pero después de casi un centenar de intercambios se volvió un problema real para Ning Zhi.
Después de fallar un último intento de atrapar la espada, Ning zhi tomo distancia y sonrió con algo de desgana “Me rindo”.
Viendo su cuerpo, lleno de cortes Ning Zhi solo pudo negar con la cabeza “No estoy dispuesto a morir por diez mil cortes” Con algo de desgana en su voz termino por decir “Si hubieras sido mi primer oponente habría tenido una buena oportunidad de atrapar esa espada escurridiza tuya”
“Pero no fui tu primer oponente”, dijo Xu Rin con confianza, pero entonces vio al hombre de mediana edad y dijo con duda “He ganado, ¿puedo irme ahora?”
Mo Tianzhu dijo casualmente “Eres libre de irte, el muro carmesí se abrirá cuando salgas”.
Xu Rin bajó de la arena marcial con la cabeza baja y susurro “Buena suerte a todos...". Y dio un último vistazo a la plaza, vio una multitud en la que faltaba su maestro (irme es lo único que puedo hacer...). Entonces, con una mezcla compleja de emociones, corrió fuera de la familia.
Ning Zhi bajo de la arena marcial y fue junto con los demás de túnicas carmesís.
El joven frente a los cultivadores miró a los miembros de la familia Xu “¿Quién más sube?".
Entre la multitud, varios se animaron a avanzar; se negaron a creer que todos ellos podrían ser tan aterradores como Ning Zhi. Pero, antes de que ellos pudieran llegar a la arena marcial, alguien se adelantó. Un cultivador con una espada ya desenvainada y con sus ojos enrojecidos. Se presentó frente a la multitud de cultivadores de túnicas carmesíes.
“¡Xu Namg, séptima etapa de condensación de qi!” Su grito fue visceral. Entonces señaló a alguien entre la multitud “¡Ven aquí!".
El señalado se sorprendió y subió a la arena marcial con un salto.
“Xie Yu, cuarta etapa de condensación de qi” se presentó ahuecando los puños, entonces desenvaino su espada.
"Empiecen”
La familia Xu tuvo plena confianza en Xu Namg, después de todo, sin incluir a Xu Zhen; él era el mayor talento de la generación menor, incluso fuera de la familia era bien conocido por su uso de la espada. Incluso si Xie Yu fuera un genio celestial como Ning Zhi, con tres etapas de cultivación de qi de diferencia, Xu Namg tenía las de ganar.
Y entonces... Ambos avanzaron al mismo tiempo. Se escuchó el chasquido de las espadas chocando y se movieron ambos a una velocidad asombrosa; en menos de cinco respiraciones intercambiaron más de diez movimientos.
Todo terminó abruptamente, después de que el sonido del metal chocando sonara una última vez... Algo salió volando; eran tres dedos de Xie Yu. El cual no pudo seguir sosteniendo su espada; su espada tintineó al chocar con el suelo. Y entonces cuando la espada de Xu Namg estaba a punto de atravesar su cráneo... “¡Me rindo!”, dijo apresuradamente XIe Yu. La espada se paró en seco, a un pelo de la frente de Xie Yu.
La familia estalló en vítores; la victoria de Xu Namg les trajo esperanza. No festejaron la victoria de Xu Rin, ya que cuatro murieron antes de ella y fue solo una victoria por desgaste.
Pero esta vez Xu Namg arrasó con su oponente; por supuesto que festejarían.
Xie Yu, bajo de la arena marcial, regresó con sus compañeros.
“Eres libre de irte”, dijo Mo Tianzhu.
“Me quedaré”, dijo con una voz llena de resentimiento. La mirada de Xu Namg no apuntaba a Mo Tianzhu, quien estaba a su lado; o a Xie Yu, que estaba frente a él, no, su mirada estaba centrada en el líder de la familia, su padre, que se encontraba detrás del otro hombre de mediana edad, detrás del joven.
Xu Namg estaba enojado, más que lo que jamás haya estado; sentía que respiraba fuego.
“¡Tú sube!” Señaló a alguien más de entre los cultivadores de las túnicas carmesíes. Hacer que uno de ellos se rindiera no calmó su ira en lo más mínimo.
El señalado por Xu Namg subió a la arena marcial. “Gui Han. Cuarta etapa de condensación de qi." Ahuecó los puños y se inclinó.
“Ya me presenté”, dijo Xu Namg, intentando imitar el tono de Ning Zhi, que dijo lo mismo antes.
“comienzen”
Gui Han se mantuvo en su lugar, con calma, esperando a que Xu Namg inicie el ataque.
Y así sucedió: Xu Namg cerró la distancia y atacó al cuello de Gui Han; rápidamente realizó un desvío externo de la espada, pero... Xu Namg cambió rápidamente la dirección de la hoja y, con un corte diagonal ascendente... partió por la mitad la cabeza de Gui Han.
Verdaderamente, en toda la generación menor de la familia Xu, no había nadie con la habilidad de espada de Xu Namg y aquí se demostró.
Después de que la mitad de la cabeza de Gui Han cayó al suelo, él se desplomó como una muñeca de trapo. Pero Xu Namg apretó los dientes y pateó el cadáver de Gui Han fuera de la arena marcial.
“¡Tú sube!” Señaló a alguien más de la multitud o mejor dicho, a alguien frente a la multitud... al joven frente a todos.
Sorprendido, se señaló a sí mismo con una sonrisa confiada. “¿Seguro? Sabes que -”. “Estás en la quinta etapa de condensación de qi, lo sé", interrumpió Xu Namg. “Incluso los incivilizados del continente Xing saben sentir auras, por si no lo sabía, su gran alteza", dijo con un sarcasmo lleno de ira.
El joven solo se rio de buena gana y levanto su dedo índice “si puedes seguir peleando después de uno de mis golpes será tu victoria” Dijo antes de saltar a la arena marcial
“Si recibes un tajo de mi espada, será tu muerte”, dijo Xu Namg imitando el tono de aquel joven.
“Tienes una confianza que solo la ignorancia puede dar”, dijo el joven con un poco de burla en su voz.
“Comiencen”
La expresión de Xu Namg era seria. Se lanzó a una velocidad mucho mayor que en sus duelos anteriores y, cuando estuvo lo suficientemente cerca, “¡Técnica de las Nueve Ondas Cortantes!” Su espada vibró y, en un instante, lanzó nueve destellos de luz plateada en direcciones impredecibles.
El joven miró decepcionado la técnica marcial de Xu Namg.
“¿Esta era tu carta de triunfo?” Con una sola mano redirigió los nueve destellos de luz plateada y sonrió. “¿Eso es todo?”
Nu Namg levantó su espada y lanzó un tajo hacia abajo, con toda su fuerza. Pero, a medida que la espada descendía hacia la cabeza del joven... un estruendo sonó y Xu Namg salió volando más de seis pasos antes de llegar al suelo; la pierna del joven seguía en el aire, una simple patada frontal envió volando a Xu Namg.
Xu Namg se llevó las manos al pecho por el dolor que lo abrumaba; jadeaba por aire, pero no podía respirar. De las comisuras de su boca comenzó a escurrir sangre y, aunque intentó, no pudo volver a ponerse de pie.
El joven miró al lamentable Xu Namg y encogió los hombros “Tomaré eso como si no pudieras seguir peleando”.
Se dio la vuelta y volvió a sentarse casualmente en el suelo, justo donde estaba inicialmente.
Fuera de la plaza, a unos pocos pasos se encontraba Xu Zhen, impresionado. “Padre... ¿Él realmente está en el quinto nivel de condensación de qi? ¿Cómo puede haber tanta diferencia entre ellos y nosotros?”.
Xu Lie, a su lado; se tomó un momento antes de responder “Hijo…”, se rasco la cabeza, dudando de qué palabras usar. “En el Gran continente tienen métodos de cultivo absolutamente superiores que los que hay en el continente Xing… no hay comparación”.
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