Mutaciones oscuras
Wayne estaba con su familia hablando con Beatrice.
—¿Así que ya capturaste a Kevin?
—Sí. Nos dio trabajo pero al final lo conseguimos y están sucediendo muchas cosas.
—¿Cuáles? Ah ya no me digas, es secreto. Está bien —dijo ella, hizo una pausa y luego le preguntó—. Entonces ¿Kevin te ha preguntado por mí, padre?
—No. Pensé que iba a hacerlo cuando nos vimos pero no lo hizo.
Beatrice se sintió algo triste.
—¿Puedes…? —le preguntó ella pero Wayne la interrumpió con una negativa.
—Ni pienses que lo voy a traer o llevarte conmigo para que lo veas. Es muy peligroso. Estamos trabajando con él. No queremos que se nos salga de control.
En ese momento Wayne recibe la señal de emergencia de Kevin. Su reloj de pulsera en su mano izquierda sonaba sin parar.
—Hablando del Rey de Roma —pensó Wayne mientras observaba su reloj dijital—. Tengo una llamada de emergencia.
—Parece que tienes que irte.
—Si tengo que volver y no te preocupes en su momento dejaré que lo veas.
Wayne regresó a la ACM ese mismo día en un jet privado y se reunió con Kevin.
—¿Qué sucede? —le preguntó.
—El chico oscuro va a regresar —le dijo Kevin.
—¿En qué basas tu conjetura?
Kevin le explicó que se comunicó con el elemento y que el chico oscuro pudo haber robado la habilidad de volver a vivir y que al regresar podría ser el guardián del elemento Oscuridad y sería mucho más fuerte que antes.
—Mmm. Eso no es suficiente pero no podemos darle la espalda a esa información —pensó Wayne—. Ok Kevin gracias por la información. Ordenaré a que investiguen posibles apariciones del chico oscuro.
Wayne se reunió con los suyos e incentivó el aumento de la seguridad, investigación y rastreo de los cambios en el ambiente y personas en todo su alcance. Luego mandó a citar a Kevin a la sala de reuniones. Eran las 10:00. Cuando llega observa que hay gran mesa y alrededor de ella estaban Wayne, Wade, Linda y 5 soldados especiales. Kevin se ubica en una posición de la mesa.
—Ya estamos todos —dijo Wayne—. Empezamos.
—Estamos listos —dijo Wade.
—Tenemos que partir para Iraq. Una de sus fuerzas militares perdió una base de forma extraña y brutal. Nos pidieron ayuda para apoyar con la investigación del caso. Es posible que tenga que ver con lo que nos comunicó Kevin —dijo Wayne
—¿Solo vamos nosotros? —preguntó Kevin.
—A parte de nosotros vamos a llevar 4 equipos. Combate, científicos, médicos e ingenieros. El viaje será de 15 horas. Vamos a partir a las 22:00 de hoy. ¿Alguna pregunta?
Hubo silencio.
—Si no hay nada más que decir entonces descansen y prepárense que partimos esta noche —dijo Wayne.
Kevin se percató de que Linda lo había estado mirando como si echara de menos verlo y se retiraron. Mientras, Kevin estaba en su cuarto pensaba acostado.
—¿Cómo estarán mis padres? Los extraño mucho. También a mi amigo Ralph, ese loco trastornado. Beatrice…..Bueno estoy con su padre ahora, así que pienso que debe de haberle dicho algo de mí. Esta noche nos vamos, así que su familia va a estar preocupada. Tengo que cuidarlo por ella. He pasado por mucho, morí, volví a vivir ahora como un guardián y todavía lo que me espera. No debo haber recorrido ni la mitad del camino aún. Leyla debe estar en lo suyo junto con Brad. Es famosa, tiene su vida hecha, lo que le queda es mantenerla. Y buscarse otro novio, el que tenía la traicionó. Desde que estoy en esto he conocido muchas personas. Rompí el hielo con aquella chica que no sé su nombre y difícilmente la olvide porque es la única con la que he estado. Al final está Linda. Tengo que verla, su mirada en el salón fue diferente. ¿Querrá decirme algo? Para hablar con ella tengo que ser discreto, no debe ser aquí, hay cámaras y micrófonos por todos lados sin contar los dispositivos que tenemos dentro de nosotros. Por alguna razón no nos dejan acercarnos. Hay que esperar a que lleguemos a Iraq, quizás tengamos una oportunidad de vernos a solas sin que nada ni nadie sepa y no nos interrumpa. Jajaja, cualquiera que me escuche pensará que estoy planeando hacer cosas sucias con ella, aunque no estaría mal, y ya tengo algo de experiencia. Lástima que estoy envuelto en esto contigo ¿Verdad Wy? —hablaba Kevin solo.
—Absolutamente. Pero que haya resultado una vez no significa que nunca vaya a fallar.
—Sí tienes razón. Y en caso de que fallara tú pasarías a ella ¿verdad?
—Y ella sería mi guardiana entonces.
—Y ¿Qué pasaría conmigo?
—De no morir, pasarías a ser una persona normal con la mitad de lo que te queda de vida y las personas que conociste no tendrán recuerdos tuyos el tiempo que estuviste conmigo.
—Ok era lo que quería saber. ¿Oye y sabes con qué objetivo Caronte quiere destruir el mundo?
—Nadie lo sabe. Ni siquiera yo. Lo que sí sabemos es que no es nada bueno.
—Sería bueno saberlo. La próxima vez entraremos a su mente. Esa es la única manera de saberlo o forzarlo a que nos lo diga. Bueno Wy este cuerpo necesita descansar. De todos modos no es tan malo que haya caído en manos de estas personas. Nos sirve para buscar y enfrentar a Caronte con más facilidad.
Partieron para Iraq a la hora programada en 3 aviones de transporte escoltados por 10 aviones de batalla. En uno iban Kevin con Wayne, Linda y Wade y en los otros el resto de los compañeros. Todos con trajes avanzados. El de Kevin le permitía ver su capacidad. Así sabría cuando de estaría agotando la energía del elemento.
—Estamos a punto de entrar en la frontera de Iraq —dijo uno de los pilotos.
—Establece comunicación —dijo Wayne.
—Cómo ordene —respondió el piloto y luego de varios intentos no pudo comunicarse.
—¿Probaste con otra frecuencia?
—Sí y nadie responde.
—Esto es preocupante. Esperemos un poco más —dijo Wayne.
Entonces Wayne solicitó la presencia de todos en el puente y le explicó la situación y se dirigió a Kevin—. Haz el campo de fuerza alrededor de todos.
—A sus órdenes —dijo Kevin y así lo hizo.
Pasó un rato y 3 aviones de batalla y uno de transporte explotaron de repente y el caos empezó.
—¡Rápido tomen acciones defensivas! —ordenó Wayne comunicando a todos.
Kevin fue con los pilotos y activó la visión electromagnética y vio con sus ojos misiles invisibles que se acercaban.
—Son misiles invisibles —pensó Kevin y luego habló en voz alta—. ¡Rápido tomen acciones evasivas todos los aviones! Son misiles invisibles, vienen de frente, son muchos y al parecer pueden atravesar el campo de fuerza —dijo Kevin.
Todos los aviones dieron giros bruscos y soltaron contramedidas pero no se pudo impedir que explotara y cayera el avión de carga restante y 2 más de guerra. Solo estaban el que ellos estaban y 5 de batalla.
—¿Por qué no los detectan los radares? —preguntó un piloto.
—No lo sé. Quizás sus fuentes de calor son suprimidas aunque estén activas —dijo Kevin ya que se percataron que las contramedidas no hicieron que los misiles se desviaran. Algunos chocaron con las bengalas pero fue por coincidencia
—Imposible. Aún no se ha llegado a ese nivel tecnológico —dijo Wayne.
—Están todos los tipos de detección activados y aún así no los vemos —dijo uno de los pilotos.
—Esto no va bien —dijo Wayne.
De repente los 5 aviones de batalla que restaban empezaron a despedazarse como si les golpearan balas invisibles hasta que explotaran y quedaran ellos solamente.
—Algo los golpeó desde atrás —dijo Wade.
—Daré un vistazo hacia atrás —dijo Kevin observando hacia atrás mirando a través del avión con la visión—. Estamos perdidos.
—¿Qué ves? —preguntó Wade.
—Hay 5 aviones de batalla no tripulados detrás de nosotros. —explicó Kevin y se percató que un aura oscura emanaba de ellos—. Un aura oscura los cubre esa debe ser la causa y por lo que veo nos dejaron para el final. Veamos que quiere. Supongo que se va a comunicar con nosotros. Parece que no nos va a atacar por el momento y nos dejaron porque de seguro a quien quiere es a mí.
—No vamos a dejar de luchar, hay que seguir adelante —dijo Wayne.
Estuvieron esperando y conversando mientras tanto.
—Hay un intento de comunicación hacia nosotros —dijo uno de los pilotos.
—Recíbela —ordenó Wayne.
—Solo quiero al chico guardián. Entréguenmelo y no habrá más muertes —dijo una voz extraña a través del comunicador del avión.
—¿Dices eso luego de quitarle la vida a muchos de nosotros? —le dijo Wayne.
—Entonces seguiré haciéndolo a la fuerza y no les va a gustar —dijo la voz.
—Nos estás subestimando —dijo Wayne y cortó la comunicación dirigiéndose a Kevin—. No te vamos a entregar Kevin. Si el destino del mundo depende de eso no te vamos a ceder tan fácil ¿Estás listo?
Kevin asintió con la cabeza.
—¡Ahora! —dio una orden Wayne y Kevin se teletransportó al exterior. Estando en el aire usó la compresión de tiempo a la vez que flotaba para no caer usando la levitación magnética con dificultad porque no la dominaba bien y les lanzó un choque electromagnético hacia atrás haciendo visibles los aviones agresores, también creó un campo de fuerza con forma de círculo en cada mano que se las lanzó a dos de los aviones enemigos, luego hizo 3 más simultáneamente para los 3 restantes y para terminar les lanzó haces de electricidad que absorbieron. Luego se tele transportó hacia dentro del avión nuevamente y desactivó la compresión de tiempo. El pulso electromagnético que había lanzado se expandió haciendo visible las aeronaves y los campos de fuerza y electricidad al impactar en ellos fueron absorbidos. Entonces unos haces de luz descendieron del cielo destruyendo los 5 aviones enemigos. Fueron 5 satélites de ataque que Wayne había preparado con antelación.
—¡Eso es! —exclamaron todos con aires de victoria pero sintieron dos fuertes explosiones en la parte trasera del avión.
Uno de los aviones logró lanzar 2 misiles en el último momento antes de destruirse, estos atravesaron el campo de fuerza e impactaron en el avión que empezaba a descender.
—Prepárense para el impacto —dijo Wayne—. Kevin, no desactives en campo de fuerza por nada. Esa es nuestra salvación.
Todos estaban sujetándose fuerte observando mientras descendían. Kevin expandió el campo de fuerza a cada persona para que cuando cayeran los impactos no les hicieran daño y cuando el avión impactó en tierra, el estruendo hizo que todos perdieran el conocimiento.
Pasó un tiempo y Kevin fue despertado por Wade que escuchaba su voz lejos hasta que poco a poco la fue escuchando acercándose hasta que se despertó.
—¿Cómo están todos? —dijo Kevin levantándose ligeramente.
—No todos. Los pilotos murieron y algunos soldados. Solo quedamos Linda tú, yo y 20 soldados élite. Wayne que está herido.
—No pude salvarlos a todos. Cuando me quedé inconsciente, el campo de fuerza debió dejar de proteger a muchos. Rayos ¿Dónde estamos? —preguntó Kevin.
—Al parecer estamos cerca de una ciudad en ruinas rodeada por un desierto —la voz de Wade sonaba apagada.
—Vamos a tener que refugiarnos allí —dijo Kevin quejándose del dolor que se le iba quitando por la regeneración.
—De todos modos muchos nos salvamos. Los dos médicos que sobrevivieron están atendiendo a los heridos.
—Sabes que puedo ayudar con las heridas —le recordó Kevin a Wade.
—Lo sé, no podemos malgastar tus habilidades así que te pido que ayudes a los más graves empezando con Wayne.
—Está bien —dijo Kevin.
—Vamos —le dijo Wade—. Estaba esperando que despertaras. Linda y otros grupos fueron delante.
Partieron a la ciudad en ruinas y se alojaron en un edificio en construcción.
Kevin recorrió el edificio junto con Wade y observó a lo lejos el avión que estaba aún echando humo. También había ruinas de otros edificios y más lejos un desierto. Además estaba anocheciendo.
—Esto no me gusta ¿Ya pidieron ayuda? —preguntó Kevin.
—Estamos sin comunicación, con poco alimento, pocas municiones y armas. Lo que nos queda es esperar prácticamente aquí en este maldito lugar a resistir hasta que moramos o aparezca alguna ayuda de la nada —dijo Wade.
—Parece que hubo guerra aquí. Todo está destrozado y hay mucho polvo.
—Si —asintió Wade.
Llegaron hasta Wayne y los que están más mal heridos.
—Aún está inconsciente —dijo Wade.
Kevin lo tocó hasta que le regeneró todo su daño por completo.
—Ya está mejor pero está débil porque perdió mucha sangre —dijo Kevin.
—Los médicos se encargarán del resto. Aprovecha y sana a los más graves. Cuando termines ven a verme —le dijo Wade.
Kevin así hizo y se reunió nuevamente con Wade.
—Linda y algunos soldados están patrullando los alrededores pero están expuestos. Necesito que tomes un punto con amplia visión ya que eres el único que puede ver si hay alguien invisible ya que nuestras tecnologías son inútiles contra eso. Yo me quedaré aquí a proteger a los heridos.
—Está bien. Voy al punto más alto del edificio para extender mi campo de visión y avisarles lo más rápido posible algún cambio. ¿Tienes algún comunicador? Parece que los de los trajes no funcionan aquí.
—Sí. Ten este. Solo hay 3, el tuyo, el mío y el que tiene el puesto de comunicaciones —dijo Wade—. Antes de que te vayas necesito que cargues algunas baterías para no quedarnos sin energía. Empieza por el puesto médico, luego el de comunicación y la de los trajes de los soldados que están patrullando. Empieza por las baterías de nuestros comunicadores.
Kevin tomó las baterías de los comunicadores de ellos, les dio carga y las colocó y probaron comunicarse con éxito.
—Reconozco que eres algo arrogante y me caes mal por eso, pero puedo ver que eres un gran líder Wade —le dijo Kevin—. Tenía que decírtelo no me quería quedar con eso. Lo siento.
—Yo también lo siento. Te envidio. Eso ha hecho que te menosprecie y que te haya tratado mal algunas veces. Atraes a muchas personas incluso a las chicas. Pensé que solo estabas fingiendo. Que tienes doble personalidad. Esa son las personas que más odio pero me he dado cuenta que eres sincero.
—Oye. Tú no tienes nada que envidiar. Ya tienes todo lo que necesitas. Eres fuerte, bien parecido, eres un líder sabes pelear y eso algo que ni siquiera yo poseo. Es por estas habilidades que soy alguien —le dijo Kevin poniéndose de pie y extendiéndole la mano.
Wade le dio la mano a Kevin sin decir nada. Esa fue su respuesta.
—Toma esta comida —le dio Wade una caja pequeña con comida.
—No. Prioriza a los que están más necesitados.
—Tú estás dentro de nuestras prioridades. Entiende tu posición. Necesitas recargar energías para que puedas ayudar a los demás. Es una orden. Además la vas a necesitar luego de cumplir con todas las tareas que te esperan para que no te debilites.
—Está bien —asintió Kevin. Agarró la caja de comida y se retiró saludando a Wade.
Kevin fue al puesto médico, luego al puesto de comunicaciones donde se quedó un momento.
—Gracias a tu energía podemos seguir intentando buscar comunicación. Tenemos para varias horas —dijo uno de los soldados que operaba las comunicaciones—. Eres nuestro as.
—Bueno solo hago porque tenemos que ayudarnos para sobrevivir en este lugar y por favor no me eleven tanto.
—Qué modesto eres.
—Jaja está bien. ¿Oye y hay alguna novedad respecto a las comunicaciones?
—Nada. Esta área tiene mucha interferencia. Es muy probable que esto sea lo que no permita que nos encuentren y lo que no permite que nos podamos comunicar con nuestros trajes. Creemos que si por un momento se altera esa interferencia nos detecten.
—No prometo nada pero veré qué puedo averiguar acerca de esta interferencia. A penas lo haga me comunico con ustedes.
—Está bien. Confiamos en ti. Pero trata de no hacer nada indebido.
—Tranquilos.
Kevin se retiró y fue a los soldados que estaban patrullando ya que los trajes necesitaban energía. Quedaron muy conformes y se sintieron más seguros. Entonces Kevin subió al punto más alto del edificio. Alrededor de 100 metros de altura. No usó ninguna habilidad para no alterar las comunicaciones y ahorrar energía espiritual. Tuvo que subir muchas escaleras. Cuando llegó, se sentó al borde del techo del edificio activó la visión electromagnética y se sentó a observar. El sol terminaba de esconderse en el horizonte. Ya era de noche y la luna llena estaba en su punto más alto alumbrando ligeramente todo el ambiente. En el fondo del edificio Kevin veía las luces del puesto médico y las de comunicaciones.
—Wade. Hice lo que me ordenaste y ya estoy en la parte superior del edificio. ¿Está todo en orden? —le dijo Kevin.
—Si por el momento. Pero Wayne aún no se recupera por completo. Ya le transfundieron sangre pero parece que tiene una infección interna. Está estable por el momento —dijo Wade.
—Ok. ¿Comunicaciones? —preguntó Kevin dirigiéndose a ellos ya que los trunkings se comunican los 3 al mismo tiempo.
—Nada. Seguimos sin comunicación al exterior —respondieron ellos.
Kevin observó al horizonte viéndolo todo como un ambiente energizado.
—Parece que la radiación que nos rodea es causa de algo que hubo en este lugar y quizás sea lo que nos mantenga a salvo de que nos detecten. Analizando un poco la situación. El aura de Oscuridad absorbe el campo de fuerza permitiéndole atravesarlo. La próxima vez que lo haga tengo que añadirle electricidad para que no suceda. Ahora que me percato ¿dónde estará Linda? —se preguntó Kevin.
—Aquí estás —le dijo Linda sentándose al lado de él.
—Oh vaya Linda. Ahora mismo estaba pensando en ti.
—¿Ahora es que te acuerdas de mí? —le preguntó ella.
—Estaba ocupado con varias cosas y me desconecté de otras —le respondió Kevin.
—Está bien. Debe ser mucha la carga que llevas —le dijo ella.
—Te veo bastante bien. Eso me alivia aunque no pude protegerlos bien a todos —le dijo Kevin.
Linda estando sentada apoyó los pies levantando las rodillas. Apoyó sus brazos en ellas, apoyó su cara en los brazos mirando a Kevin mientras la brisa nocturna ondeaba su pelo largo —Gracias por salvarme—. Le dijo ella recordando cuando la salvó del chico oscuro, cuando le desactivó el dispositivo dentro de su cuello y ahora con el avión.
—No me es tan sencillo aceptarlas, yo les iba a quitar la vida a ustedes antes de morir. Leyla me detuvo. Por mi culpa, aquel chico oscuro destruyó tu base, murieron los tuyos y solo quedas tú. Ahora estamos trabajando juntos. Qué ironía ¿Verdad? —le dijo Kevin mirándola a los ojos.
—Yo quería morir junto con mis compañeros. Los extraño. Haber sobrevivido me dejó frustrada. Pero luego de poder seguir con vida, me di cuenta de que aún tengo razones para seguir viviendo. Tú me diste esa oportunidad. Y la verdad no te guardo rencor. Aunque tú te detuviste, nosotros continuamos y te quitamos la vida pero regresaste. Eres increíble. Te digo más, el pasado quedó atrás. Siempre se puede empezar de cero aunque es difícil jeje —le dijo ella.
—Bueno todo eso de morir y regresar es una larga historia y difícil de creer.
—No importa. Me gustaría conocerla y ahora que lo pienso, no recuerdo haberte dicho mi nombre real. ¿Cómo lo averiguaste?
—Cuando estaba en el mundo espiritual seguí el rastro de mi cuerpo te vi hablando con Líder que te llamaba por tu nombre —dijo Kevin.
—¿Qué es lo que eres Kevin?
—Una persona común y corriente portadora de un elemento universal. Otra larga historia —le dijo Kevin y pensó—. Aunque en realidad soy el Guardián.
—¿Puedes hablarme del mundo espiritual?
—El mundo espiritual es muy diferente a esto. Puedes ver y atravesar muchas cosas que no se ven a simple vista. Te mueves con poco esfuerzo. Puedes volar. Moverte a la velocidad del pensamiento. Es espléndido pero ahora está en peligro por Caronte.
—¿Qué sucede luego de morir? —le preguntó ella.
—Actualmente las almas de las personas son capturadas por Caronte. Guardián del elemento universal oscuridad. Se supone que las está reteniendo. Lo siento. Debe tener a tus compañeros. Creo que deberíamos dejar de hablar de cosas malas y ¿No deberías estar patrullando?
—Vaya ya no me quieres aquí. Deberías agradecer al menos que tengas mi compañía y que no estés solo.
—No lo digo por eso. Debes obedecerle a Wade es nuestro líder.
—Buff. Para mí nuestro líder eres tú. Además ¿Quién dice que no estoy patrullando? Lo estoy haciendo contigo ¿no?
—Por supuesto —afirmó rápido Kevin.
—Asentiste rápido. ¿Apuesto que estabas pensando otra cosa? —le dijo ella.
—Y qué tiene de malo —dijo Kevin devorándola con la mirada.
—Pareces un virgen pervertido.
—No me importa serlo. Estoy acostumbrado.
—La mayoría de las personas a esa edad ya han roto el hielo. Has estado perdiendo el tiempo.
—Bueno yo no soy la mayoría.
—Que desperdicio. Al final parece que estás destinado a morir virgen. ¿No te da resentimiento eso? —le dijo ella acercándose a él con travesura pero cuando sintió el olor de Kevin cambió su opinión y pensó—. ¿Ehh? Su cara dice que es virgen pero su olor no miente. No lo es. No me había percatado antes porque estaba concentrada en las peleas con él. De todos modos seguiré la corriente como si lo fuera.
—No me distraigas que estoy patrullando.
—No puedes evitar sentirte nervioso cuando una chica se te acerca —le dijo ella con su cara cerca de la de él.
—No te equivoques —le dijo Kevin mirándola de frente—. Podría hacerte cosas que te dejarían satisfecha sin hacértelo.
—¿Ah sí? ¿Cómo cuáles? —le preguntó Linda curiosa.
—Es un secreto.
Este se acercó para besarla pero ella se apartó.
—Ah. Ah. Dónde ibas.
—Es el resultado de provocarme.
—Bueno siguiendo la conversación —dijo ella apartándose un poco de Kevin— No habíamos hablado desde que nos separaron cuando salimos dela base.
Kevin tomó la mano de ella.
—Es para que te sientas mejor. Debes sentirte agotada.
—Como aquella vez cuando me sanó las heridas extrañas —pensó ella.
—Aunque también es una excusa para acercarme a ti jeje —le dijo Kevin con picardía.
—Así es mejor —le dijo ella abrazándose del brazo de Kevin a la vez que recobraba ánimo físicamente—. ¿Cómo supiste de la caja negra neuronal?
—¿Qué es eso?
—El dispositivo que tenía implantado dentro de mi cuello.
—Lo vi con la visión electromagnética. Cuando nos tele transportamos y te quedaste dormida lo desactivé con un pequeño choque eléctrico. Estaba conectado a su sistema nervioso. Por las señales que emitía parecía peligroso.
—Gracias a eso también sigo viva. Si es así como dices ahora mismo podría estar en las manos de ese tal Caronte.
—Yo también sigo aquí por ti. Eres lista. También me salvaste con aquella bengala. Casi paso al control de aquel chico oscuro.
—Voy a seguir así un rato si no te molesta —le dijo ella estando recostada a Kevin.
—Al contrario.
—Espero no quedarme dormida como la última vez —dijo ella a la vez que sentía un calambre protector que la hacía recuperar del cansancio.
Hubo un silencio.
—Kevin —le habló Wade por el trunking.
—Adelante Wade.
—¿Has visto a Linda? —le preguntó.
Kevin miró a Linda y ella le dijo que no con la cabeza. Kevin le puso mala cara.
—No.
—Trata de encontrarla con tu visión. Me preocupa que le haya sucedido algo.
—Sí. A mí también me preocupa. Apenas la vea te comunico —dijo Kevin.
—De acuerdo.
—¿Alguna novedad?
—Todo continúa tranquilo sin alteración.
—Seguimos en contacto —le dijo Wade y terminó la comunicación.
—Es mejor que te vayas —le dijo Kevin a Linda.
—Es una lástima. Me habría gustado estar más tiempo aquí contigo —dijo ella poniéndose de pie.
—¿Para qué? ¿Para provocarme por gusto? Dale acaba de irte —le dijo Kevin.
Ella se iba medio riéndose y Kevin la detuvo.
—Espera —le dijo Kevin deteniéndola.
—¿Qué?
—Toma esta comida —le dijo Kevin mostrándole la caja en su mano—. Ya yo comí. Wade me pidió que te la diera si te veía. —Kevin se acercó a ella y le puso la caja en la mano—. ¿Qué pasa?
—Qué ingenuo eres —le dijo Linda.
—¿Eh? —se extrañó Kevin.
—Saca tu propia conclusión —le dijo ella sonriendo
—Te ayudaría a bajar con la levitación magnética pero no debo alterar innecesariamente la señal que nos rodea como medida de seguridad.
—Está bien. De todos modos me dejaste llenaste de energía —le dijo ella despidiéndose sensualmente y Kevin volvió a imaginarse cosas sucias con ella. Ella aprovechó para irse rápido.
—Esta chica. Me pregunto si estará jugando o lo hace en serio —se preguntó Kevin y recordó sacando la conclusión que le había dicho—. Ahh ya me di cuenta. Qué tonto soy. Me habría creído y anotado puntos con ella si le hubiera dado la comida de mi parte. Aun así no me gusta quedarme con el mérito de otros.
Kevin continuó observando. Pasada una hora se escuchó el sonido de un avión en la distancia y hubo una distorsión transitoria en las ondas electromagnéticas en el aire.
—¿Comunicaciones alguna novedad? —preguntó Kevin.
—Sí. Justo cuando pasó el caza. El terminal dio señal de comunicación pero se volvió a caer. Te íbamos a avisar pero nos llamaste antes. Pensamos que la causa haya sido de ese avión.
—Ok Gracias. También me percaté de eso y estoy analizando. Nos mantenemos al tanto.
Kevin creó un flujo de electricidad en su mano con diferentes intensidades hasta que hizo que las ondas en el espacio alrededor de su mano hicieran un efecto parecido al que presenció cuando se distorsionaron las señales en el aire. Pasó un buen rato probando intensidades de electricidad en diferentes frecuencias hasta que lo consiguió.
—¡Perfecto! —exclamó Kevin y se comunicó con Wade—. Wade tenemos que hablar. Vamos a vernos en comunicaciones.
—Ok te espero allá.
—¿Qué sucede? —le preguntó Wade a Kevin ya estando en comunicaciones ambos.
—Puedo crear un flujo magnético para alterar las ondas en el aire y restablecer las comunicaciones un momento.
—¿Estás seguro?
—Totalmente.
—Aún no han venido por nosotros. Parece que no nos han encontrado. Si hacemos eso que dices quizás nos detecten y vengan por nosotros. Vamos a hacerlo pero tenemos que prepararnos antes. Convoquen una reunión general —ordenó Wade y se reunió con todos menos los que se estaban recuperando y los médicos.
Estando todos reunidos Wade habló en frente de todos.
—Esto es lo que vamos a hacer. Vamos a pedir ayuda. Pero en el momento que lo hagamos nos van a localizar y de seguro vendrán por nosotros. Hasta el momento que la ayuda llegue tendremos que aguantar.
Un soldado alzó una mano.
—Sí —dijo Wade dirigiéndose a él.
—¿Y si la ayuda no llega? —preguntó el soldado y enseguida muchos empezaron a murmurar— ¿No es mejor permanecer seguros hasta que aparezca alguna ayuda?
—Si no llega la ayuda moriremos de hambre. Si luchamos tenemos a quién nos proteja y tendremos más probabilidad de sobrevivir —dijo Wade a Kevin.
Hubo silencio. Eran las 4:00.
Kevin energizó sus ojos, levantó su brazo derecho. Lo energizó también e hizo un pulso de electricidad que tocó a todos dejándolos atónitos.
—Lo que acabo de hacer es aumentar ligeramente los impulsos nerviosos de todos. O sea ahora tienen los mejores reflejos de batalla del mundo. No pueden perder. No podemos perder. Protegeremos a todos los que podamos. No los vamos a abandonar. Si vamos a morir. Yo moriré aquí luchando para protegerlos a ustedes —dijo Kevin aún con el brazo derecho electrizado.
Entonces todos levantaron su brazo derecho también. Incluyendo Wade y dieron un grito de guerra.
Kevin miró a todos y cuando dirigió su mirada a Linda ella estaba sonriendo.
Y se reunieron los Jefes de Brigada con Wade, Kevin, Linda y los de comunicación.
—Este es el plan —dijo Wade—. Cuando estemos preparados cada uno en su puesto de batalla le daré la señal a Kevin para que haga su trabajo. En ese momento vamos a establecer comunicación para pedir ayuda y cuando lo hagamos, Kevin va a crear un campo de fuerza alrededor del edificio para protegernos en caso de que haya ataques de artillería. Si no hay nada más que decir.
Wayne y algunos enfermos se acercaron. Este tenía el traje de combate puesto.
—Señor general —dijo Wade haciéndole una reverencia—. No puede pelear en ese estado.
—No voy a quedarme sentado mientras ustedes están peleando. Soy uno de ustedes —dijo Wayne.
—Supongo que no tenemos opción ¿Qué crees Kevin? —le pidió opinión Wade.
Kevin se acercó a Wayne y le tocó el hombro derecho e hizo lo mismo que con los demás mejorándole la habilidad de reflejos de combate.
—No estarás completo sin esto.
El general sintió el efecto que Kevin puso sobre él.
—¿Cuándo aprendiste eso? —le preguntó Linda.
—Durante el entrenamiento en la base. Te dije que si me enfrentabas de nuevo no iba a ser igual. Y esto no es nada deja que me veas en acción, hay más —dijo Kevin presumiendo y autoanimándose.
—Bueno dejen las presunciones para luego —dijo Wade y se dirigió a Kevin—. ¿Kevin?
A penas Kevin escuchó su nombre hablado de Wade, este se concentró e hizo que su cuerpo emitiera ondas electromagnéticas las cuales aplacaban las que hacían interferencia. Todos activaron sus trajes y unas máscaras tecnológicas cubrieron sus rostros.
—Ya tenemos comunicación —dijeron los operadores de radio y enseguida establecieron comunicación.
Unos de los operadores logró comunicarse con una base Iraquí ya que conocía su idioma habló con ellos explicándole la situación. Lograron darles las coordenadas de la ubicación de ellos pero enseguida se cayó la comunicación.
—¿Qué sucedió? —preguntó Wade.
—Apareció otra señal de interferencia y anuló la mía —dijo Kevin—. Parece que ya saben dónde estamos.
—Pero ya nos comunicamos y logramos darles nuestras coordenadas —dijo Wade y luego habló alto—. Prepárense que esto ahora comienza.
El sol comenzó a salir por el este. Se escuchó un sonido como de muchos misiles despegando a lo lejos.
—¡Pónganse a cubierto! —dijo Kevin. Extendió una mano al cielo. Un rayo de electricidad salió de ella y el rayo chocó un poco más arriba del edificio y de ahí bajó en forma de semiesfera el campo de fuerza que cubrió todo el edificio y a la vez le añadió electricidad estática—. ¡Prepárense para los impactos y tápense los oídos.
Los sonidos se iba acercando hasta que impactaron cerca de 100 misiles uno detrás del otro causando un sonido ensordecedor. Algunos chocaron directo en el campo de fuerza y otros a los alrededores. El ataque duró casi 2 minutos. Mucho polvo se levantó. Observó en la pantalla digital de su traje que estaba al 70% de su capacidad.
—Reforzar el campo de fuerza con electricidad estática para que los misiles combinados con oscuridad no penetren, agota considerablemente. Este ataque me agotó casi un 30 % de mi capacidad —dijo Kevin.
De pronto el cielo se iluminó y descendieron 5 haces de luz que impactaron directo al campo de fuerza y otros alrededor. Creando destrucción.
—¡Satélites de ataque también! —exclamó Wayne.
La capacidad de Kevin bajó al 60%
—Poco a poco está disminuyendo. Parece que los rayos no tenían Oscuridad —dijo Kevin.
—Aquí somos blanco fácil. Vamos a tener que movernos de aquí —dijo Wade.
—No voy a aguantar mucho aquí. Vamos a tener que movernos para resistir más —dijo Kevin.
—Los heridos ya están bien y pueden moverse por su cuenta —dijo Linda llegando e informando.
—Bien, vamos a movernos de aquí y vamos a dispersarnos a los edificios de atrás —dijo Wayne.
—Pero —dijo Wade.
—Si nos mantenemos unidos corremos el riesgo de ser aniquilados todos juntos. Además ayudamos a Kevin que resista un poco más para que nos pueda proteger —dijo Wayne.
—Vayan. Yo me quedo en la línea frontal. Los misiles vinieron de allá así que es probable que vengan por el frente y necesito varios soldados conmigo. No debo asesinar, solo proteger —dijo Kevin.
Se quedaron con Kevin, Linda y Wade y 9 soldados. Wayne y el resto se fueron.
—Vamos a ubicarnos nosotros también sin separarnos demasiado en otros edificios —aconsejó Wade.
—Está bien. Pero no me gusta mucho la idea —asintió Kevin.
Cada uno se quedó con 3 soldados y se ubicaron en edificios diferentes. Había mucho silencio. Kevin estaba es una posición en el edificio que se colocó mientras que los otros 3 soldados estaban también separados en otras posiciones en ese mismo edificio. De repente Kevin escuchó varios disparos de ametralladora dentro de su edificio y cuando llegó, batió la puerta donde escuchó los disparos y se asustó cuando vio a uno de sus soldados que se sujetaba la cabeza que luego giró y fue torcida perdiendo la vida el soldado. Escuchó una voz demoníaca que gritó hacia él y marcas en la pared, suelo y cosas que se caían de una mesa daban indicios que algo se acercaba a Kevin y este lanzó un pulso eléctrico hacia delante haciendo visible lo que asesinó al soldado.
Era una mujer con ojos oscuros. Su cuerpo emanaba un aura oscura también y corriendo súper rápido se acercó a Kevin haciendo gestos y gritos extraños.
—Estabilización —Kevin chasqueó los dedos de una mano apuntando a esa mujer oscura que casi estaba encima de él y un humo azulado con electricidad estática salió de la mano impactando y ralentizando el movimiento de ella como si la pusiera en cámara lenta y luego dijo—. Cinética —agarró con electricidad una caja de metal, la jaló y la hizo estrellar en un costado de ella pero la caja rebotó y aún ella se mantenía en el mismo lugar pero poco a poco en cámara lenta reaccionó al impacto y cuando el efecto de estabilización terminó a los pocos segundos salió volando la mujer oscura, alejándose varios metros de Kevin.
Entonces llegaron los otros 2 soldados y enseguida le dispararon. La mujer gritó y cuando murió una sombra salió de ella.
—Eso no pasará a otra persona ¿verdad? —preguntó uno de los soldados.
—Parece que no. De lo contrario se habría apoderado de uno de nosotros —dijo el otro.
Aparecieron 2 más detrás de los soldados pero esta vez eran hombres. Kevin estaba frente a ellos.
—¡Detrás de ustedes! —exclamó Kevin.
Usó la cinética para agarrar a los soldados y jalarlos hacia él fuera del alcance de las personas endemoniadas. Lanzó una onda de electricidad haciéndolos visibles y sin perder más tiempo:
—Electrocución —dijo Kevin lanzándoles electricidad paralizándolos.
Los soldados se recuperaron del jalón y le fueron a disparar a ambos enemigos.
—¡Esperen! —les dijo Kevin para que aún no los asesinaran pero fue tarde.
—Lo sentimos —dijo uno de los soldados.
—Quería tratar de analizarlos —dijo Kevin.
—Eso es muy arriesgado. No tenemos tiempo para titubear —dijo el otro soldado y luego le preguntó a Kevin por el tercer soldado.
—Lo siento, no pude llegar a tiempo para salvarlo. No esperaba que hubiera personas que se hicieran invisibles también. Hay que avisarles al resto —dijo Kevin y se comunicó con Wade—. Wade perdí a un soldado. Hay personas invisibles, tienen fuerza sobre humana, son rápidos y parece que están poseídos por una sombra que los hace mutar. Tenemos que juntarnos de nuevo y rápido. ¿Dónde están ustedes?
—En el edificio que tiene una torre de comunicación destrozada —respondió Wade y luego se preocupó—. Kevin escuché un ruido. Creo que están aquí.
—¡Wade! ¡Wade!. Usen granadas de humo, tierra, bengalas, agua, fango o lo que sea para que los hagan visibles. No quiero perderlos. Traten de reunirse y aguantar hasta que yo llegue —dijo Kevin preocupado y escuchó voces, disparos y la comunicación se cayó—. Rayos no debí separarme de ellos. Vámonos.
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